domingo, 26 de junio de 2016

SOBRE FRIENDLY OLD SCHOOL

Me encanta el Old School. Me recuerda a las primeras partidas que jugué a este juego allá por 1993 - 1994 (la verdad, no lo recuerdo muy bien).

Eran épocas donde no había internet (bueno, si lo había, pero no estaba ni mucho menos tan extendido como lo está ahora), y en las ciudades pequeñas como de la que vengo, tan solo había 1 o 2 tiendas donde nos reuníamos los chavales (había poca gente de mediana edad) a jugar con las cartas que conseguíamos a través de sobres, compras en la propia tienda e intercambio con el resto de "parroquianos".

Siempre recordaré, con cariño, frases como "¿quién tiene tutores azules?" (Esto es de la época de mirage, algo más actual...) a voz en grito en la puerta de la tienda, o aquellas barajas monoazules que te ganaban con un feldon's cane, los demonic tutor, etc.

También recordaré siempre cuando a Magic se jugaba de otra forma, más sencilla, más romántica.

Al fin y al cabo, son recuerdos peregrinos y algo borrosos, de cuando éramos niños (y no tan niños), en los inicios del juego.

Por todo ello, desde que conocí esta iniciativa, me encantó la idea. Sin embargo, a medida que leía más y más acerca de la misma, empecé a ver cosas que no me gustaban, y que iban en contra del significado que tenía para nosotros el juego en aquella época, la misma de la que son las cartas con las que jugábamos.

Te das cuenta de que tiene un componente pimp, elitista, endogámico y fuera del contexto del que hablo, que hace inaccesible el formato a la gran mayoría.

Ha habido modificaciones del formato para paliar esto: A las expansiones originales (Alpha, Beta, Unlimited, Arabian Nights, Antiquities, Legends, The Dark) se les ha añadido otras que tendrían que haber tenido cabida desde el principio (Revised y Fallen Empires, ya que son de aquellos años). Esto ha permitido abaratar sensiblemente el formato (sobre todo por Revised).

Ha habido más revisiones, pero ninguna me ha satisfecho del todo, con respecto a lo que estoy comentando: Poder volver a ver el juego como en la época en la que empezamos. En aquella época, los recursos eran limitados y no conocíamos conceptos como el citado pimp. No era un juego con el alcance actual, ni las cartas tenían el valor que tienen ahora. Era algo más puro, era tan solo un juego.

Sin embargo, a su vez se debe seguir manteniendo el espíritu del formato, ya que si no perdería su sentido. Es un formato en el que tan solo deben jugarse cartas de las citadas expansiones, cartas con reglas hechas en ese contexto histórico de Magic.


Por ello, propongo un manifiesto para Old School, en el que intentaremos definir un formato más justo para todos, pero sin perder el espíritu original. El objetivo, es evitar todos los aspectos subjetivos de esta filosofía Old School, y tratar de quedarnos con el metajuego que se tenía entonces.


Por supuesto, ese toque añejo que dan las restricciones comentadas, no debería ser ignorado. Tan solo jugar con las expansiones originales del formato le da un toque especial al mismo.

Por ello, desde aquí también abogamos por incentivar este tipo de esfuerzos que realizan los jugadores para jugar barajas con cartas de más de 20 años de antigüedad.

Sin embargo, entendemos que no debería ser una restricción obligatoria, sino un incentivo adicional al propio formato.

Para ello, en los distintos eventos, torneos o partidas con premios en juego, se debería reservar reconocimiento (en forma de premios o de otra forma) a las barajas "oldie" que respeten el espíritu original del Old School. Así, por ejemplo, se podrían dar premios para el top del torneo y premios para las barajas "oldie".

Con todo lo expuesto anteriormente, habrá gente que esté completamente de acuerdo, gente a la que esto le parezca una aberración, e infinidad de opiniones intermedias. Lo que aquí se intenta es simplemente recuperar el juego que se tenía en aquella época, pero contextualizado en la época en la que vivimos.

No olvidemos que han pasado muchas cosas desde entonces, muchas ediciones nuevas, el impacto social y económico actual del juego no puede ser ignorado (ya que hace inalcanzable para muchos acceder a esas cartas) y que excluir a la gente por el mero hecho de no poseer una edición concreta de las cartas no le hace ningún favor al formato, y lo condenará a la más absoluta marginalidad.

Nada más. Podéis dejar vuestras opiniones, en los comentarios.

Gracias.


Un saludo.

No hay comentarios: